- Relación con inversores: Aquí sus funciones se basan en la Comunicación Financiera y el seguimiento del contexto social y geopolítico.
- Marketing estratégico y publicidad: en este apartado toman relevancia funciones relacionadas con el desarrollo de productos, la publicidad y la gestión y elección de patrocinios.
- Asuntos Corporativos: Cobra importancia dentro de las organizaciones la necesidad de relacionarse con los agentes decisorios de las regulaciones y políticas de cualquier índole: las relaciones con el Gobierno y Reguladores; seguimiento del contexto social y geopolítico; y la gestión de issues.
- Comunicación no se puede olvidar, pero entendida como una función encaminada a la puesta en valor del intangible. Aquí aparecen los principales públicos de interés con los que la organización tiene que relacionarse.
- Reputación Corporativa: se ha convertido en una de las funciones clave de los nuevos dircom. Salvaguardar la reputación de las compañías. Aquí son clave el análisis de los riesgos reputacionales; el uso de métricas e indicadores; la aplicación de modelos de gestión; y la correcta definición del mapa de stakeholders.
- Responsabilidad: es clave en la supervivencia de las organizaciones que deseen operar con legitimidad (importante: otorgada por sus públicos).
- Marca e identidad: El CCO deberá ser el encargado de traducir la identidad, el propósito, la visión, la misión y los valores de la organización a los diferentes stakeholders. Así mismo deberá ser capaz de conseguir la vinculación y alineamiento con los stakeholders de la marca corporativa; ser capaz de estructurar la arquitectura de la marca y su protección legal; y la expresión visual e implementación en todos los puntos de contacto con la marca.
- Generación de contenidos: es una de las funciones que engloba el resto. Aquí el responsable deberá ser capaz de crear la narrativa corporativa a través del storytelling y los nuevos formatos, todo ello con el fin de generar contenido.
Antes de comenzar, creo necesario hacer una diferenciación, por un lado es requerido unos conocimientos empresariales “básicos” podríamos decir y por otro lado conocimientos de comunicación.
Por la parte de conocimientos empresariales es muy conveniente que los directores de comunicación sepan cómo funcionan y se dirigen las empresas, los mercados y la mercadotecnia. Por tanto, tener formación básica sobre Administración y Dirección de Empresas, Economía o Marketing siempre favorecerá el desempeño del DIRCOM.
Por la parte de los conocimientos de comunicación es esencial que el profesional de la dirección de comunicación se sepa desenvolver con soltura en los siguientes ámbitos:
- Las teorías de la Información y la Comunicación y las herramientas tecnológicas prácticas.
- La Planificación Estratégica
- La Responsabilidad Social
- La Sociología, para entender cómo funcionan los procesos sociales y su interrelación con el ámbito empresarial
Tras bucear un poco más entre toda la información que nos proporciona Internet he encontrado un breve reportaje que realizaron a mi profesora de Dirección de Comunicación en la presentación del Manual de Comunicación para dircoms. Me ha parecido esclarecedor por su síntesis.
En resumen, para Magda Mut, los ingredientes para cocinara un buen Director de Comunicación son:
- Creatividad
- Capacidad Estratégica
- Herramientas de comunicación
- Indicadores de rendimiento
- Asesoramiento serio incluso en temas peliagudos para la dirección
Sin embargo, parece bastante lógico que cualquier proceso que tenga que ver con la comunicación y la gestión de intangibles esté impregnado de creatividad, ya que cuanto más enraíze la creatividad en el seno de la empresa, más alta será su capacidad diferenciadora.
Por último, quería destacar que me ha parecido curiosa la última cualidad necesaria del director de comunicación, y es que desde la Asociación de Directivos de Comunicación, parecen haber detectado que los profesionales saben hacer un buen análisis y diagnóstico pero que sin embargo no son capaces de asesorar con suficeinte eficiencia para solucionar los diferentes problemas que pueda tener la empresa, debido a la polémica que pueden suscitar. Por tanto, debe ser crucial la profesionalidad de los Dircom a la hora de realizar su trabajo para que la profesión no pierda su credibilidad, que tanto esfuerzo está costando de adquirir.
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